8 de noviembre de 2009

Los días transcurrieron bastante bien. Con muchos paseos, fiestas y excesos, naturalmente, pero bien.
Era el día del gran concierto en el Wembley Stadium, Londres.
Todos estaban en la prueba de sonido, incluso Valentina, que probaba algunos instrumentos también.
Eso era lo bueno de saber tocar guitarra, bajo y batería.
A ella le pidieron que probara la segunda guitarra. Arthur estaba enfermo, y no podía ir a la prueba de sonido.
- Tocás bastante bien. - le dijo Noah cuando terminaron de tocar una canción - Se nota que tenés influencia mía.
Eso sonó bastante egocéntrico. Pero a Valentina no le importó. Estaba feliz de que Noah Grown le haya dicho que tocaba bastante bien la guitarra.
En la prueba de sonido había algunos fans. Eran cinco o seis, la mayoría mujeres, y casi todas, bueno, en realidad TODAS miraban a William con caras de fanáticas enamoradas.
Cuando terminó la prueba de sonido, William no tuvo más remedio que bajar y saludar a aquellas fans. Todas lo abrazaban y le decían que lo amaban, y todas le parecían igual de insulsas a William. Pero hubo una que no. Hubo una que llamó la atención de William, y con la que se quedó hablando.
Valentina la miró fijo del escenario.
Era una muchacha de aproximadamente unos dieciséis años, cabello oscuro, tes tostada por el sol, y ojos oscuros también como el cabello. Era una muchacha caderona, pero con poco busto.
- Es una tabla de planchar - dijo Valentina cruzada de brazos, y mirándola con desprecio, como si se le hubiera escapado un pensamiento.
- Jajajaja, qué mala! - exclamó riendo Noah.
Valentina la seguía mirando con desprecio.
La chica tenía puestos unos jeans rotos, y una remera de Draft. En los pies, llevaba una especie de botas de taco medio alto.
- Aparte, no te podés poner eso para venir a un concierto de Draft! Es DEMASIADO, como te vas a poner unas botas de taco alto? No se da cuenta de que la onda es venir en zapatillas? - exclamó Valentina, bastante fuerte.
- Shhh, callate que te va a escuchar! - la detuvo Binzy.
Valentina se calló por unos segundos, pero seguía mirando con asco a aquella chica.
Pasó un rato, y todos se fueron a sus camarines, incluso William.
Valentina estaba en el camarín de Noah, que se quejaba porque Arthur no llegaba, y faltaban dos horas para el concierto.
- Dónde está?! - gritaba mientras intentaba llamar a su casa.
- Calmate, ya va a venir. No dijiste que estaba enfermo? - lo calmaba Valentina.
- Sí, sí, pero dijo que aún así vendría! Que no era para tanto! - le contestó Noah.
- Bueno, tranquilizate, ya va a venir.
Valentina intentaba calmarlo, pero pasó una hora y media, y Arthur no llegaba. Noah lo llamó una vez más, y esta vez Arthur atendió.
- Cómo que no podés venir?! En serio?! No sabía que era para tanto! Por qué no nos avisás antes que estás con fiebre? No, no vengas, quedate tranquilo. No, así no vas a venir. Quién va a tocar en tu lugar, decís? Emm... bueno, la tenemos a... a... a Valen. - le dijo Noah a Arthur.
Valentina levantó la cabeza, y la mirada de la revista que estaba leyendo, y miró a Noah, sorprendida. El le hizo señas de que esperara y siguió hablando con Arthur.

No hay comentarios:

Publicar un comentario