10 de noviembre de 2009

Valentina aguardó a que Noah cortara con Arthur. Cuando éste lo hizo, dejó la revista a un lado, y se paró repentinamente.
- ¡¿Cómo yo?! - exclamó sorprendida.
- Sí, vos, vos vas a tocar con nosotros. Dale, decime cuántas adolescentes tienen la oportunidad de tocar con su banda favorita en vivo? - intentó convencerla Noah.
- Primero y principal: no soy una adolescente, soy una adulta joven. Segundo: no es que no quiera, es simplemente que... me da un poco de miedo. Además, ya suficientes críticas tengo de parte de la prensa por estar con ustedes "de prestado", según ellos, y ahora esto, va a hacer que los periodistas sigan acotando y acotando y opinando y opinando, y le va a hacer saltar la vena a todas las fans envidio... - Valentina hizo una pausa, y sonrió con un poco de crueldad, como saboreando la envidia de parte de otras fans que se aproximaba.
- Ves? Yo sabía que querías tocar con nosotros. Bueno, a ver, dale, ya tenemos que estar saliendo, ahora cuando nos den los instrumentos, vos agarrás la guitarra de Arthur, y te acomodás en su lugar. - le indicó Noah.
- Pero pará... - lo detuvo Valentina - ... no me sé todas las canciones de Draft...
- Eso no importa, llevás cuatro años tocando la guitarra, me dijiste, no? Bueno, a esta altura sacás las canciones de oído facilmente. Dale, no te pongas nerviosa, vas a ver que va a salir todo bárbaro. Además, presiento que tocás mejor que Arthur - acotó riendo Noah.
Cuando estuvieron en el escenario, Valentina, se colgó la guitarra de Arthur, y se acomodó en su lugar. Sabía ese setlist de memoria, y sabía los acordes de gran parte de las canciones. Solo había algunas que no sabía.
Además, ni siquiera tendría que cantar. Solo tocar la guitarra, y lucirse.
Lucir que estaba con Draft, la banda con la cual muchísimas personas desearían tocar, aunque sea, una canción, y ella tenía la oportunidad de tocar alrededor de quince o dieciséis canciones.
Las luces del escenario estaban apagadas, naturalmente, y cuando se iluminaron, se escuchó el grito de noventa mil personas (aproximadamente) y también se vieron algunas (varias) caras de sorpresa.
Qué hacía esa ahí? Si ella no era de la banda.
Era una pregunta que se hacían todos, con envidia, molestia y asombro en partes iguales.
Después de las primeras tres canciones, pareciera que el público se hubiera puesto de acuerdo para corear "Queremos a Arthur, queremos a Arthur!" y hacer sentir mal a Valentina.
- Okay, okay. Basta ya. Arthur está enfermo, así que en su lugar, esta noche toca Valentina. Si alguien tiene un problema, está en su libre derecho de abandonar el estadio ahora mismo. Y no, no les vamos a devolver el dinero. - dijo William parando el concierto unos minutos.
Al escuchar esto, Valentina se sintió, realmente, una más de la banda.
Sintió que al final, era cierto. Ella no estaba "de prestado" ahí.
Cuando terminó el concierto, decidieron descansar un rato en los camarines, y luego salir a algún bar.
Acordaron todos a cuál irían, y cada uno se fue a su camarín.
Valentina estaba con Noah y William, en el camarín del primero, y otra vez, leía esa revista que había dejado un rato para el concierto.
- Estuvo genial ese concierto. Y tocaste muy bien. - la felicitó Noah.
- Gracias, pero debo confesar que me puse muuuuy nerviosa. Más cuando todos esos envidiosos comenzaron con el "Queremos a Arthur". - se quejó ella.
- No les hagas caso. Mañana todo el mundo va a estar hablando de esto. Tenés que acostumbrarte, sé que es difícil. Pero bueno, es el precio que hay que pagar por ser genial. - le contestó William.
Valentina soltó la revista y se recostó en un sillón - bastante cómodo - que había ahí.

1 comentario:

  1. La caaaaaaaaaaaaaaaaaaaara de Valen cuando imagino la vena hinchada de las fans! Loca, sos ídola! (vos Valeriaaaa)

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